Premio de Derechos Humanos “Gonzalo Muñoz” reconoce a dos incansables defensores de la memoria en Valparaíso
En una significativa ceremonia realizada en Plaza Yungay, en el marco de la XX Jornada por la Memoria y los Derechos Humanos, que impulsa el Colectivo 19 de Noviembre y Casa Memoria, se llevó a cabo la entrega del Premio Regional de Derechos Humanos “Gonzalo Muñoz”. Una distinción que desde 2012 busca poner en valor la convicción y el aporte de personas que, en la región, han dedicado su vida a la construcción de memoria, justicia y defensa de los derechos humanos.
El reconocimiento lleva el nombre del joven militante Gonzalo Muñoz, asesinado por la dictadura en 1985 en Valparaíso, y surge desde las convicciones que dieron vida -hace 20 años- al Colectivo 19 de Noviembre.
Desde el Colectivo destacaron que “decidimos no homenajear a los luchadores, solo cuando ya han muerto. Apostamos a la vida y sus alegrías, a las luchas de hoy y a quienes las hacen carne día a día. Nuestro Premio Gonzalo Muñoz reconoce la trayectoria por la lucha en defensa y promoción de los derechos sociales”.
Este 2025, la premiación distinguió a dos referentes del trabajo comunitario, artístico y político en materia de derechos humanos y memoria:
Javier Rodríguez Calderón de la Agrupación de Amigos y Familiares de Miguel Woodward y (Póstumo) a Jaime Garnham Saravia, artista, luchador incansable y uno de los fundadores del Colectivo 19 de Noviembre.
Javier Rodríguez Calderón
Nacido en Valparaíso, su historia está marcada por una profunda conciencia social forjada en su comunidad, en la vida poblacional y en la resistencia a la dictadura. Sin militancia partidaria, su compromiso ha sido siempre desde la convicción de que todas las personas merecen vivir en un país libre y justo.
A comienzos de los años 2000 lideró un emblemático proyecto comunitario en Cerro Placeres, recuperando un microbasural para transformarlo en una plazoleta pensada para la niñez y la vida en comunidad. Desde entonces ha participado activamente en distintas iniciativas de memoria, especialmente ligadas al caso de Miguel Woodward, desarrollando un trabajo permanente en defensa de los derechos humanos.
Hoy, Javier continúa trabajando y articulando redes para garantizar que la memoria permanezca como un acto de resistencia y construcción colectiva.
Jaime Garnham Saravia
Artista y defensor incansable de las luchas sociales, inició su camino político y creativo en su juventud, canalizando sus inquietudes en organizaciones estudiantiles y posteriormente en la Universidad de Playa Ancha, donde estudió arte.
Participó activamente en la lucha contra la dictadura a través del arte y la acción política. Además, contribuyó de forma fundamental a la construcción de rutas y sitios de memoria en la región. Su creación artística y compromiso político fueron inseparables hasta su fallecimiento en diciembre de 2022.
Aunque no conoció a Gonzalo Muñoz personalmente —pues llegó a Valparaíso el mismo año de su asesinato— Jaime se unió tempranamente a los esfuerzos por resguardar y difundir su historia. Fue uno de los 19 fundadores del Colectivo 19 de Noviembre, presidió la organización por seis años y fue un impulsor clave de la Casa Memoria Valparaíso como espacio político y comunitario.Diseñó la exposición sobre la vida de Gonzalo Muñoz, participó en la creación de rutas de memoria en la ciudad y colaboró activamente en el reconocimiento de sitios de memoria como Ritoque , Melinka en Puchuncaví y Rocas de Santo Domingo, contribuyendo a que esas historias no se pierdan en el olvido.
Jaime nos dejó en el año 2022, para seguir pintando y luchando desde otros planos. Hoy, su huella persiste en cada cuadro y muro pintado, en cada acción colectiva, en cada memoria defendida.
La entrega del premio fue realizada de manera póstuma, siendo recibida por su hija Lirayen Garnham, en medio de un profundo reconocimiento colectivo a su enorme legado.
“Jaime fue lucha y creación constante; nos honra haber sido compañeros de un gigante amoroso y revolucionario”, expresaron desde el Colectivo.
Memoria Activa
La XX Jornada cerró recordando que la defensa de los derechos humanos continúa siendo urgente frente al avance del negacionismo y la violencia política. La distinción Gonzalo Muñoz reafirma que, la memoria sigue viva en las luchas territoriales, artísticas y comunitarias.
Como cada año, el Premio “Gonzalo Muñoz” renueva una convicción:
mientras existan quienes defiendan la dignidad humana, la memoria no será derrotada.